martes, 2 de febrero de 2021

¿Líder o jefe? Entienda cómo el posicionamiento correcto ayuda a su carrera

¿Preferirías ser un líder o un jefe? ¿Sabes la diferencia entre los dos? Según el diccionario, el líder es la persona que ejerce influencia en los comportamientos, pensamientos u opiniones de los demás. El jefe, por definición, es un empleado o empleado que dirige un servicio, un director,

Por qué el líder está mucho más relacionado con la personalidad de los líderes y el jefe corresponde sólo a la posición que ocupa? Jefe y líder tiene la principal diferencia en la influencia que cada uno tiene en sus empleados,

Si te ha gustado más el líder, ven con nosotros y te enseñaremos cómo ser un buen líder y cómo subir de rango,

Las principales diferencias entre un líder y un jefe

En general, los jefes están centralizando a la gente, distantes del equipo y sin mucha empatía. ¿Conoces a ese gerente que nunca está cerca o, cuando lo está, no hace mucha diferencia en la rutina de sus subordinados? ¿O, peor aún, el que se mete en el camino más de lo que ayuda? Estos son perfiles típicos de jefes malos,

Para escapar de este estereotipo, es esencial que el gerente tenga paciencia, esté más presente y aprenda a delegar funciones a sus empleados. Estas son algunas de las características clave de un perfil de liderazgo. A menudo, el profesional tiene facilidad para una gestión más cercana y descentralizada. Sin embargo, incluso aquellos que no nacen con el don del liderazgo pueden trabajar para llegar a ese punto

.

Para ello, los primeros pasos deben ser:

  • aprender a oír antes de hablar
  • acceso de opiniones y comentarios
  • respecto y valorar el equipo (sin él, no hay administración);
  • crear una relación de confianza mutua con el equipo;
  • divide más que tareas, pero también los objetivos y ansiedades detrás de cada trabajo.

A continuación, hablamos un poco más sobre algunos de estos puntos,

La relación con el equipo

Para el jefe, tu equipo está compuesto por personas que deben obedecerte a cualquier precio, siempre pensando en los objetivos de la empresa. El líder entiende que los empleados también tienen sus metas personales y trata de insertar esto en las tareas diarias de sus líderes.

O otra diferencia es que, a diferencia del jefe, el líder se siente parte del equipo porque también realiza funciones, no sólo las delega. Se esfuerza por ser consciente de todo lo que el equipo está haciendo y siempre está a su disposición para ayudar. Las personas del equipo se convierten incluso en su equipo, incluida la creación de una excelente red de redes para el futuro.

La implicación y asociación del gerente con el equipo ayuda a reunir a las personas y tiene el poder de hacerlas sentir parte del proceso. El resultado es un equipo animado y motivado para trabajar con responsabilidad y compromiso con los resultados. Además, los empleados satisfechos con el trabajo tienden a permanecer en él, disminuyendo así la facturación dentro de la empresa.

La capacidad de saber cargar

Es común que los líderes de equipo, porque se convierten en parte de él, terminar extrapolando barreras de trabajo y amistad. Hay que tener cuidado con esta línea fina, porque el buen gerente es el que sabe el tiempo para motivar al equipo y estar al lado de él, pero que también puede cargar y ser más rígido cuando sea necesario.

Para los jefes, es más fácil desempeñar este rol porque los empleados se sienten intimidados por él. Sin embargo, no siempre hay garantías de que las personas obedecerán sus órdenes. E incluso si lo hacen, podría ser mal-desafiado o «de todos modos».

Para que los empleados realicen tareas difíciles o aburridas, lo ideal es que el líder sepa explicarles la necesidad de ello. Además, dividir estas tareas entre el equipo es esencial para que cualquier empleado se sienta desfavorecido.

Retroalimentación constante

Porque no sabe cómo realizar el trabajo de su propio equipo, el jefe puede ser criticado por sus subordinados a sus espaldas y no siempre recibe esta retroalimentación directamente, convirtiéndose así en «ciego» a sus propios defectos.

Ahora el líder abre el juego al diálogo con el equipo. Ambos reciben comentarios sobre su rendimiento y pueden ayudar a sus empleados a mejorar. Es importante que los comentarios al equipo se den individualmente cuando son negativos y colectivamente cuando son positivos. Al criticar, el líder debe dar ejemplos concretos de fracasos y luego sugerencias de cómo la persona puede mejorar.

S igualmente, al recibir comentarios negativos del equipo al respecto, el gerente debe interpretar la crítica constructivamente y buscar maneras de mejorar de ella. Una manera de alentar a los empleados a mostrar sus opiniones es crear encuestas sobre la percepción del equipo, el trabajo y el liderazgo. En función de sus resultados, será posible trazar rutas para mejorar el entorno de trabajo.

Creación y mejora de capacidades

Cuando aceptamos sugerencias del equipo para mejorar su trabajo, el líder admite que no lo sabe todo y está dispuesto a cambiar cuando sea necesario. Evita el estancamiento tomando cursos, asistiendo a conferencias, leyendo textos de su área, etc.

En cuanto valora al equipo, los alienta a hacer lo mismo y también les instiga la creatividad y la innovación a diario ofreciendo desafíos a sus líderes. Cada vez que un empleado recibe una nueva responsabilidad y necesita adquirir conocimientos para ejecutarlo, tanto él como su líder crecen profesionalmente,

Estos es otra gran diferencia entre el líder y el perfil de jefe tradicional. A diferencia del segundo, el primero sabe que no es más que nadie. La posición de gestión puede ser fugaz. Es importante tener esto en cuenta y actuar siempre con humildad. En lugar de intimidar al equipo tratando de jugar un papel superior como muchos jefes, el líder se ve a sí mismo como igual a los demás. El poder no sube en tu cabeza bajo ninguna circunstancia,

Esciendo un líder o jefe es una cuestión de postura. Idealmente, el profesional no espera el momento de ascenso para posicionarse como líder del equipo. Este proceso debe comenzar naturalmente. Liderando a tus compañeros de trabajo, las posibilidades de que tus superiores te noten y te ofrezcan una vacante de gestión son mucho mayores. Ese es el tipo de elección que puede impulsar su carrera,

Ahora, si esperas demostrar liderazgo solo cuando te levantas de tu cargo, las posibilidades de ser solo jefe y no líder aumentan considerablemente. Si quieres tener éxito en tu carrera, debes aprender a ser un buen líder y actuar así desde tu primer trabajo o pasantía,

Para aquellos que todavía están en la universidad, le recomendamos leer nuestro texto sobre cómo planificar su carrera antes de comenzar su vida profesional.

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